Hace tiempo comenté que me gustaban los retos y que por ello, un lindo gatito había entrado en mi vida.
Por aquellos entonces, no sabía que era realmente que un gato entrase en mi vida. No conocía los ruidos en la arena, las carreras por la casa a horas intespectivas, los arañazos en el sofá, las veces que se sube a las ventanas y mancha la pared pero sobre todo, no sabía la cantidad de pelos que soltaba el susodicho animal de nombre (para mi gusto poco acertado) Raúl.
Y si la convivencia én pareja ya de por sí es dificil, con una mascota peluda lo es aún más. Que si tu gato esto, que si tu gato aquello…QUE SI NO PUEDO CON TODO LLENO DE PELOS!!!
Así que cuando, no recuerdo muy bien cómo, llegó a mi la noticia de que existía un cepillo llamado Furminator que sin arrancar quitaba todo el pelo muerto a la mascota de turno…pensé…Si Dios existe ese cepillo tiene que ser mío :P
Un mes después y tras sufrir una pequeña estafa al realizar la compra por Ebay, puedo decir que todo lo que dicen es verdad. El cepillo definitivamente es la pera limonera.
Quita todo el pelo muerto de tu mascota, sin arrancar. Y no sólo el pelaje se le queda mucho mas bonito y brillante después del cepillado sino que el animal disfruta como un loco. Puedo decir que en unos 10 minutos de un tranquilo cepillado saqué una bolsa típica de la compra casi llena de pelos (pelos que por supuesto se quedan en la bolsa de basura y no en el sofá, ropa, etc etc). En resumen, estoy encantada….y Raúl parece que también. Lo recomiendo.